Para empezar vamos a airear la prenda, bien sea en la terraza o en el tendedero donde colgamos la ropa recién salida de la lavadora. La mantendremos unas horas, para asegurarnos que se ha ventilado lo suficiente.
Si el olor a tabaco es muy fuerte, bien porque estuvimos en una casa sin apenas ventilación con muchos fumadores, simplemente con dejarla al aire no se irá el olor a cigarrillo. En este caso, podemos ir al baño, llenaremos un poco la bañera con agua caliente (con unos 3 centímetros es suficiente) y añadiremos cuatro tazas de vinagre blanco, colgaremos la ropa cerca, por ejemplo en el mango de la ducha o donde creamos oportuno, cerramos la puerta del baño y nos vamos. Con el vapor que se desprende de la mezcla eliminará el olor a tabaco de la ropa.
Cómo quitar el olor de la ropa en algunos casos no es fácil, otro remedio casero para conseguirlo es usar bicarbonato de sodio. En este caso, extenderemos la prenda sobre una superficie plana y pondremos un plato con el bicarbonato cerca, que se encargara de eliminar el olor a tabaco de nuestra prenda.
Antes de finalizar vamos a dejaros un pequeño consejo, nunca rocíes la ropa con olor a tabaco con colonias o perfumes, ya que el resultado será una rara y desagradable combinación de olores.
El disfrute de una buena copa de vino puede ocasionar algún que otro incidente. Pero si te ha ocurrido, no te preocupes porque a continuación te mostraremos algunos consejos para eliminar las manchas, además del truco de la abuela del uso de la leche, que es el más común y el más extendido. Lo más aconsejable es actuar con rapidez.