Como ya sabemos las mamparas de la ducha no están siempre impecables, por eso te dejo aquí cuatro trucos para que te quede como los chorros del oro.
1. Mezclar vinagre blanco con bicarbonato de sodio para hacer un limpiador que aplicará en forma de masilla y dejará actuar por espacio de diez a quince minutos para luego frotar con un paño o una esponja.
2. Mete un poco de vinagre en un bote de spray y atomiza sobre la mampara, deja actuar por unos minutos (10 min.) para aclarar con una esponja de gel lava-loza y abundante agua.
3. Para la suciedad y cal más incrustada, prepare una lana de acero (las más ultra-fina, porque las otras rayarán el vidrio) para aplicar jabón en gel y vinagre, haciendo suaves masajes sobre la suciedad y enjuagando con agua caliente.
4. La zona de los cauchos o empaques plásticos entre el cristal y el armazón de la mampara la puedes limpiar con un paño humedecido con amoniaco y los carriles con unos “tacos” hechos con papel de cocina.